La artista señaló que nunca había pensado que llegaría al décimo aniversario como cantante en Japón, agradeciendo el apoyo continuo de sus seguidores. Lo dicho por la cantante da mucho que pensar, ya que a su debut en el año 2001 no existía tal cosa como el Hallyu y el K-pop era inexistente. Se puede decir que BoA fue una pionera de la internacionalización del K-pop, y se forjó en solitario su camino de cantante extranjera en el mercado discográfico de Japón. Al final del concierto, BoA no pudo contener la emoción y se echó a llorar. Por esto, tuvo que abandonar el escenario momentáneamente, pero al retomar la canción, volvió a llenarse de emoción. El concierto de BoA en el mes de diciembre se ha establecido como una tradición en Tokio, pero esta vez se había programado como un evento especial de retrospectiva de los años de actividad de BoA en Japón para celebrar su décimo aniversario como cantante.
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